Cuando escuchamos la palabra “suplementación” la mayoría de las personas se imaginan al típico culturista que toma proteínas y eso, en principio, echa para atrás a muchos de ellos. Aquí vamos a intentar acercar un poco este mundo a la gente de a pie, mencionando algunas de sus ventajas.

Para empezar, el objetivo de los suplementos es complementar la alimentación, es decir, aportar aquellos nutrientes o compuestos que a través de la dieta son difíciles de conseguir en cantidad o calidad adecuada.

¿Por qué cómo debemos contemplar la opción de tomar suplementos?

Hoy en día es todo un reto llevar una alimentación sana, equilibrada y sin carencias de ningún tipo, ya que es muy fácil que en nuestra vida diaria cometamos algún error (nos pasemos con las grasas, no consigamos el aporte necesario de calcio, nos saltemos alguna comida,…)

En la actualidad se están dando muchos casos de personas con problemas digestivos o desordenes alimentarios. Con los suplementos, los procesos digestivos y de metabolización son más rápidos que en el caso de la comida natural.

Una última ventaja es la comodidad. En nuestra vida diaria o deportiva nos resulta difícil llevar continuamente alimentos para cada ingesta. Por lo tanto supone una gran ayuda llevar a cualquier lado una barrita, por ejemplo.

Por lo tanto, no debe asustarnos el hecho de acercarnos a estos productos y comprobar cuanto pueden ayudarnos en nuestra vida diaria o deportiva.